A la gran mayoría de personas que ven una "peli" en el multicine del Centro Comercial más próximo, o en el sofisticado "home cinema", apenas les importa el nombre de la persona que ha dirigido el film que están viendo. Hoy,muchos de los directores, dependen del productor de turno y su nombre es apenas un apunte. Son los "Jonh Smith" del Hollywood, porque en Europa, afortunadamente, todavía señala a sus autores.
No obstante hay que reconocer que el cine americano alumbra todavía con figuras como Clint Eastwood, Martin Scorsese y Woody Allen , por citar solo a este trio de ases.
Es un buen ejercicio cinéfilo, a pesar de la vertiginosa actividad diaria, que enferma nuestra otrora tranquilidad vital, asomarse al pasado cinematográfico y explorar qué hicieron aquellos directores pioneros y si puede ser, visionar sus obras más representativas.
Hace algunos años, cuando la tele estatal no estaba infectada de "basura rosa", "telecoñas" y otros parásitos, se proyectaban por la Dos, unos interesantísimos ciclos que nos devolvieron a GRIFFITH, VIDOR, STROHEIN, LANG....Los que gozábamos de las pelis de estos señores teniamos siempre a punto el VHS para grabar, pero el implacable paso del tiempo ha dejado estos soportes tan obsoletosque el visionado de aquellas películas ha quedado fatal.
Pero se inventó el DVD y aquí tenemos en toda su gloriosa digitalización la bruma que nos estorbaba con lo que el goce llega a cimas dificilmente superables.
De esta guisa me atrevo a diseccionar una obra maestra del pasado, concretamente EL NACIMIENTO DE UNA NACION.
Racista, tendenciosa, ingenua a veces, repulsiva otras, simplista, maniquea....pero a pesar de todos estos calificativos, y por encima de todos, una obra maestra. En ésto están de acuerdo la mayoría de los críticos y todos aquellos que amamos el cine a pesar de las ideas que destilen sus imágenes.
El origen de EL NACIMIENTO DE UNA NACION fue la obra del Reverendo, racista confeso, Thomas Dixon Jr., quien en 1905 escribió una trilogía, cuya segunda parte THE CLANSMAN, AN HISTORIAL ROMANCE OF THE KU KLUS KLAN, fue la que Griffith adaptó para su película. De hecho THE CLANSMAN era el título que en un principio tenía el film y con el que fue estrenado en Riverside . Tres meses más tarde, el 3 de marzo de 1915, cuando se estrenó en Nueva York, la película cambió el título por el conocido hoy día: "The Birth of a Nation"
El proyecto, muy ambicioso para la época, ya que según Griffith se necesitaba un metraje más que considerable para contar toda la historia, tuvo varias dificultades sobre todo la oposición que las compañías mostraban a los metrajes que no se mantuvieran dentro de unos márgenes.
Una vez dado el visto bueno se calculó el coste, que se cifró en 40.000 dólares. Naturalmente esta cifra se quedó corta. Los dólares comenzaron a ascender de forma vertiginosa hasta alcanzar los hasta entonces inalcanzable para una película: ¡¡110.000!! dólares.
Sin embargo nadie tuvo que lamentar este coste excesivo, porque la recaudación del film llegó a los 18 millones de dólares. Durante dos décadas esta marca se mantuvo imbatible hasta la llegada de BLANCANIEVES Y LOS SIETE ENANITOS en 1937.
La controversia y toda clase de críticas acompañaron a la película, desde el momento mismo del estreno en los teatros de todo el pais. Griffith, curándose en salud colocó la siguiente leyenda al principio del film: "A plea for the art of the motion pictures: No tenemos ningun miedo a la censura porque nuestra intención no es ofender a nadie mostrando obscenidades o violencias. Por encima de todo tenemos el derecho a la libertad de mostra el lado oscuro, para que la virtud pueda brillar en toda su intensidad. Esta libertad es la misma que se concede al arte o a la literatura de la Biblia y de Shakespeare"
Pero a pesar de esta cita grandilocuente hubo que descolgar del montaje definitivo dos escenas. En una de ellas se mostraba de forma explícita los devaneos amorosos entre el Honorable Austin Stoneman y su criada mulata. La otra, mucho más violenta, era la castración y linchamiento del negro Gus por una pandilla del Klan.
"El Nacimiento de una Nación" era una película llamada a triunfar desde su primera exhibición. La gente pagaba gustosa la "exorbitante"(para la època) cifra de dos dólares para poder gozar de casi tres horas de espectáculo. Espectáculo donde se ofrecían dosis generosas de guerra, suspense, violencia y romance. El propio presidente Woodrow Wilson, que por entonces presidía el pais, pidió un pase privado del film. Se dice que entusiasmado exclamó: "Esto es una historia escrita en imágenes. Lo único lamentable es que haya ocurrido"....No sabemos si Woodrow se refería a los desmanes del Klan, a la guerra Civil o a la esclavitud y la segregación racial.
Naturalmente, y a pesar de las excusas de Griffith, la parcialidad está presente en toda la obra tanto en los caracteres como en los personajes. Los del Klan son heroes románticos del oprimido Sur. Los principales personajes negros son ladinos, miserables y traidores, cuando no obedientes sirvientes. Paradojicamente los roles de los principales personajes negros estaban interpretados por blancos maquillados.
En el dramático final, cuando el glorioso Ku Klus Klan suprime de un plumazo violento la supremacía negra del Sur aflora de manera más que elocuente el miedo que América tenía (y posiblemente tenga hoy) a las relaciones interraciales.
No obstante hay que reconocer que el cine americano alumbra todavía con figuras como Clint Eastwood, Martin Scorsese y Woody Allen , por citar solo a este trio de ases.
Es un buen ejercicio cinéfilo, a pesar de la vertiginosa actividad diaria, que enferma nuestra otrora tranquilidad vital, asomarse al pasado cinematográfico y explorar qué hicieron aquellos directores pioneros y si puede ser, visionar sus obras más representativas.
Hace algunos años, cuando la tele estatal no estaba infectada de "basura rosa", "telecoñas" y otros parásitos, se proyectaban por la Dos, unos interesantísimos ciclos que nos devolvieron a GRIFFITH, VIDOR, STROHEIN, LANG....Los que gozábamos de las pelis de estos señores teniamos siempre a punto el VHS para grabar, pero el implacable paso del tiempo ha dejado estos soportes tan obsoletosque el visionado de aquellas películas ha quedado fatal.
Pero se inventó el DVD y aquí tenemos en toda su gloriosa digitalización la bruma que nos estorbaba con lo que el goce llega a cimas dificilmente superables.
De esta guisa me atrevo a diseccionar una obra maestra del pasado, concretamente EL NACIMIENTO DE UNA NACION.
Racista, tendenciosa, ingenua a veces, repulsiva otras, simplista, maniquea....pero a pesar de todos estos calificativos, y por encima de todos, una obra maestra. En ésto están de acuerdo la mayoría de los críticos y todos aquellos que amamos el cine a pesar de las ideas que destilen sus imágenes.
El origen de EL NACIMIENTO DE UNA NACION fue la obra del Reverendo, racista confeso, Thomas Dixon Jr., quien en 1905 escribió una trilogía, cuya segunda parte THE CLANSMAN, AN HISTORIAL ROMANCE OF THE KU KLUS KLAN, fue la que Griffith adaptó para su película. De hecho THE CLANSMAN era el título que en un principio tenía el film y con el que fue estrenado en Riverside . Tres meses más tarde, el 3 de marzo de 1915, cuando se estrenó en Nueva York, la película cambió el título por el conocido hoy día: "The Birth of a Nation"
El proyecto, muy ambicioso para la época, ya que según Griffith se necesitaba un metraje más que considerable para contar toda la historia, tuvo varias dificultades sobre todo la oposición que las compañías mostraban a los metrajes que no se mantuvieran dentro de unos márgenes.
Una vez dado el visto bueno se calculó el coste, que se cifró en 40.000 dólares. Naturalmente esta cifra se quedó corta. Los dólares comenzaron a ascender de forma vertiginosa hasta alcanzar los hasta entonces inalcanzable para una película: ¡¡110.000!! dólares.
Sin embargo nadie tuvo que lamentar este coste excesivo, porque la recaudación del film llegó a los 18 millones de dólares. Durante dos décadas esta marca se mantuvo imbatible hasta la llegada de BLANCANIEVES Y LOS SIETE ENANITOS en 1937.
La controversia y toda clase de críticas acompañaron a la película, desde el momento mismo del estreno en los teatros de todo el pais. Griffith, curándose en salud colocó la siguiente leyenda al principio del film: "A plea for the art of the motion pictures: No tenemos ningun miedo a la censura porque nuestra intención no es ofender a nadie mostrando obscenidades o violencias. Por encima de todo tenemos el derecho a la libertad de mostra el lado oscuro, para que la virtud pueda brillar en toda su intensidad. Esta libertad es la misma que se concede al arte o a la literatura de la Biblia y de Shakespeare"
Pero a pesar de esta cita grandilocuente hubo que descolgar del montaje definitivo dos escenas. En una de ellas se mostraba de forma explícita los devaneos amorosos entre el Honorable Austin Stoneman y su criada mulata. La otra, mucho más violenta, era la castración y linchamiento del negro Gus por una pandilla del Klan.
"El Nacimiento de una Nación" era una película llamada a triunfar desde su primera exhibición. La gente pagaba gustosa la "exorbitante"(para la època) cifra de dos dólares para poder gozar de casi tres horas de espectáculo. Espectáculo donde se ofrecían dosis generosas de guerra, suspense, violencia y romance. El propio presidente Woodrow Wilson, que por entonces presidía el pais, pidió un pase privado del film. Se dice que entusiasmado exclamó: "Esto es una historia escrita en imágenes. Lo único lamentable es que haya ocurrido"....No sabemos si Woodrow se refería a los desmanes del Klan, a la guerra Civil o a la esclavitud y la segregación racial.
Naturalmente, y a pesar de las excusas de Griffith, la parcialidad está presente en toda la obra tanto en los caracteres como en los personajes. Los del Klan son heroes románticos del oprimido Sur. Los principales personajes negros son ladinos, miserables y traidores, cuando no obedientes sirvientes. Paradojicamente los roles de los principales personajes negros estaban interpretados por blancos maquillados.
En el dramático final, cuando el glorioso Ku Klus Klan suprime de un plumazo violento la supremacía negra del Sur aflora de manera más que elocuente el miedo que América tenía (y posiblemente tenga hoy) a las relaciones interraciales.
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